Ha sido una semana muy dura, semana y media, por que todavía no termino de recuperarme de la bronquitis que casi me mata. Pero ni un medicamento, oiga usted!.
El Lunes de baja, bueno, de baja, con fiebre pero peleando con el "@#€#~#@@#€" del taller. Entro allí y me encuentro al mecánico de cháchara con un viejillo del barrio, es obvio que le molesta que yo entre e interrumpa su conversación, sobre todo si es una pequeña personita que, casualmente, es una mujer!!, qué desfachatez!.
- Qué quieres!
- Mm, quiero que me cambie las dos ruedas delanteras de mi coche, que se me ha pinchado una...
- Hombre, si me dices qué ruedas son!!!!!
- Pues de 205...
- A MI CON ESO!!!!!!!, A MI CON ESO NO ME VALE!!!!, CÓMO QUIERES QUE TE CAMBIE LA RUEDA SI NO ME DICES QUÉ RUEDAS QUIERES!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
..... [momento de silencio en el que la nena coge carrerilla con un momento de silencio, mirada fría, profunda, asesina, directa a los ojos de mi víctima]
- Quiere usted decirme qué problema tiene para hablarme en ese tono?
.....[cara de estupefacción del sujeto]
- ¿YO?, yo no le estoy hablando en ningún tono!!!!!!, es que, si Vd no me dice qué ruedas quiere que le ponga, ¿CÓMO VOY A SABER SI SE LAS PUEDO PONER?!!!
[saco mi libreta y le enseño a la bestia el numerito completísimo apuntado, directamente, de la puñetera rota]
- Tengo todos los datos que usted necesita y se los puedo ofrecer sin necesidad de aguantar que me hable en ese tono, por que, de la misma manera que yo soy muy docta en mi trabajo, será usted muy docto en "cambiar ruedas", pero yo no le exijo que sepa lo mismo que yo sobre mi trabajo, así que no me haga perder el tiempo con una discusión sin el mas mínimo sentido y dígame si tiene o no tiempo de cambiarme las ruedas, sean de 205, de 1000, rojas o de la bici.
Suavecito como un guante, oiga.
El martes estaba tan malita, que según llegué a casa, tras una discusión vía correo con una de mis queridas amigas, defendiédose como gata panzarriba, por deshacer un plan previsto meses antes, me dirigí sin pasar por casa al ambulatorio. Allí, con mi mejor cara de mestoy ahogando, mirusté, me pusieron una mascarilla con oxígeno y un dilatador bronquial.
Cuando superé el pedo de oxígeno, me fui a casa, llamé a mi hermana (si, la de los suicidios en masa), le conté mis absurdas historias de ruedas, amigas, enfermedades y demás, me puse "mona" (con unas ojeras bien moraditas, los pulmones sonando a minero y un magnífico blanco en la cara) y me marché a tomarme unas cervecillas.
Me vino genial oxigenarme. Además, me invitaron a una fiesta el sábado en la que, muy probablemente, vuelva a ver al italiano y a otros tantos guiris mas.
El miércoles quedé con mi queridísimo Ivan, que se moría de ganas de presentarme a su amigo de la infancia, Patxi. No puedo yo con esos vascos, me encantan, pasé una tarde buenísima, nos reímos mucho, hablamos uno poco de todo, con esa naturalidad que los caracteriza, tan auténticos... y les encanta que yo sea un puritito veneno... misterios de la vida en los que no pienso ahondar.
El jueves salí de trabajar muy tarde. Fue toda una sorpresa encontrar una llamada del hermano de Pablo invitándome el sábado a la inauguración de su piso, inquietante que el hermano de tu ex te invite a sus fiestas. Se sintió muy apenado cuando le dije que no podría ir, me parece que también tiene ganas de charlar, como se acaba de independizar, me tiene como a una mami, pero sin ganas de sacarme los ojos.
Como había queado, bajé directamente a Madrid tardé un buen rato en aparcar en la plaza de Olavide y me dirigí al instituto finlandés. La verdad es que fue un rollete cultureta y casposillo, un montón de gente bastante mayor demasiado interesada en parecer interesante. Por ahí andaba Montxo Armendariz...
Estaba yo en la mesa de la entrada, echando un vistazo a los folletos, cuando se me acercó una señora oriunda de Finlandia, muy contenta ella hablándome en suomi...
- Emm, no entiendo nada de lo que me dice.
- NO HABLAS SUOMI??!!!
- Pues no...
- AL MENOS LO ESTARÁS ESTUDIANDO!!
- Emm, pues no, me se algunas palabras [
peppu, pippeli, satana, perkele...,
pero creo yo que esto no le va a hacer mucha gracia...]Así que nos fuimos, dejando a la señora muy ofendida por que no hablo suomi ni lo estoy aprendiendo...
Hoy he tenido una llamada de emergencia, una amiga que se casa en septiembre, anda hecha un mar de dudas y está en crisis. Él quiere casarse por la iglesia (es que esa familia...) y se da por supuesto que ella debe ceder... pero sus miedos y dudas van mas allá... y todavía tiene demasiado miedo como para enfrentarse a ello.
Así que, aquí estoy, tomándome un merecido descanso guiscaracho en mano y teclado en ristre.
...y mañana... FIESTAAAAAA!!!