viernes, 12 de diciembre de 2008

¿Amor o desamor?

Hoy me ha comentado un compañero lo mucho que le gusta
este poema y lo bien que refleja lo que es el amor...
lo cierto es que no lo había leído antes, pero me he
quedado estupefacta cuando lo he hecho,
para mi resume perféctamente lo que es un desamor,
un desengaño obsesivo...

Lope de Vega

(1562-1635)


Desmayarse


Desmayarse, atreverse, estar furioso,
áspero, tierno, liberal, esquivo,
alentado, mortal, difunto, vivo,
leal, traidor, cobarde y animoso:

no hallar fuera del bien centro y reposo,
mostrarse alegre, triste, humilde, altivo,
enojado, valiente, fugitivo,
satisfecho, ofendido, receloso:

huir el rostro al claro desengaño,
beber veneno por licor süave,
olvidar el provecho, amar el daño:

creer que el cielo en un infierno cabe;
dar la vida y el alma a un desengaño,
¡esto es amor! quien lo probó lo sabe.

martes, 9 de diciembre de 2008

Acidificación necesaria de mi patético post anterior.

Este año había decidido dejarme de gilipolleces victimistas y, en lugar de esperar que la gente se acordara de mi cumpleaños cual si yo fuera una princesita y teniendo en cuenta que yo jamás recuerdo los cumpleaños de nadie, decidí convocar a la muchedumbre en un local del centro de Madrid.

Algunos reclinaron amablemente la invitación por hayarse fuera de la ciudad aprovechando el puente. Otros alegaron a su reciente maternidad y a las enfermedades propias del invierno que todo bebé que se precie agarra fuertemente en la guardería.

La mayoría aceptó gustosa la invitación y allí quedamos, a las 9... una hora malísima, lo se, pero no tengo explicación para haber puesto semejante hora.

Aquella noche empezó estupendamente, con una llamada romántica y entusiasta de J, me fui a la cama con esa sonrisa estúpida de quien está enamorado.

Pero la mañana comenzó gris, no se muy bien por qué, quizás soñé algo feo o sencillamente tenía un mal día, no se por qué no iba a coincidir un dia apestoso con mi cumpleaños...

Hablé con una amiga que vive fuera, nos contamos chascarrilos y nos reímos un rato. Poco después de llamó mi hermana y me contó que había discutido con mi madre y que iba a ir a la celebración familiar para no hacerme un feo. Bueno, tampoco era para tanto pero la nube gris se iba instalando sobre mi cabeza.

Como buena mujer que soy y conteniendo en mi una ingente cantidad de defectos, esperaba desde hacía tiempo que un señor biencarado llamara a mi puerta para dejarme un magnífico presente, seguramente flores, pero no era de descartar cualquier otra clase de regalo... pero no tenía pinta de que aquello fuera a suceder.

Conseguí salir de casa tarde y me dirigí a casa de mis padres medio histérica y confusa por que me había comprometido a llevar una tarta que no tenía ningunas ganas de ir a comprar por lo complidado de llevar el coche hasta allí y de transportar desde el coche hasta la casa de mis padres con esa lluvia.

Total, que la comida con la familia estuvo bien, con mi madre bastante seria, pero tuvo como colofón un par de crueldades maternas que hicieron que se desmoronase mi frágil castillo de naipes, así que, me marché a mi casa llorando mis penas.

A lo largo del día fui recibiendo mensajes de cancelación de casi todo el mundo que había confirmado que vendría. Así que salí de casa con la moral por los suelos y unos bonitos zapatos.

Quedé con un amigo en el metro y nos dirigimos al local. Estaba diluviando. Nos apostamos frente a la puerta del local con estupor, estaba cerrado. Decidimos esperar en el local de al lado.

La gente fue apareciendo, mi amiga M del cole en primer lugar... mmmm, M, aquella con la que tuve la peor relación amor odio de mi vida... siempre saboteando mis pequeñas felicidades cotidianas, incontinente verbal y con capacidad de escandalizar a cualquiera... Luego mi hermana con su novio, luego las niñas, las venezolanas, tan divinas ellas y tan puras... pobres...

Mi hermana abrió la caja de Pandora cuando le preguntó a M por su reciente boda... nos contó su versión de fantasía de los paises como Tailandia, India etc. Las niñas, tan políticas como lo es la gente en el sur de américa, no daban crédito. Pero fue mucho peor cuando empezó a contar historias inventadas, como es costumbre en ella, contando con mi complicidad, "verdad Joaninha", y yo, sabiendo que son absolutamente fruto de su imaginación, asiento complaciente.

La guinda de la noche estaba por llegar cuando apareció el morreador nº2, hizo una entrada triunfal, con su patética humanidad, redondez tridimensional, se apartó del grupo y empezó a cantar con los dos amigos que se había traido de refuerzo a berrido pelado mientras me regalaba miradas de soslayo. Mi hermana me preguntó "quién es ese infraser?", las niñas me preguntaron, "y ese, ¿quién es)"... hasta que los echaron del local... pero no pudo dejarlo estar, no, tuvo que mandarme un sms diciendo que no le había hecho caso y que se nota cuáles son mis prioridades. Una obviedad, vamos.

A las tantas de la madrugada, mi amiga M comenzó a contar cómo es de alcohólico y cómo son sus hermanos de drogadictos y de malos amigos, que su hermano mayor había estado en la carcel y que su madre es alcohólica. Las niñas no pudieron soportarlo mas y salieron corriendo rumbo a sus plácidos hogares.

Así que terminé la noche con alguna copa de mas, mojada hasta el alma y con ganas de eliminar el día de mi calendario.

lunes, 8 de diciembre de 2008

El cumpleaños

Todos los años es perturbadora la llegada de mi cumpleaños, los últimos años he tratado de esconderme detrás de las lamentaciones acerca de lo solísima que estoy y lo poco que significo para la gente, vamos, la típica llorera infantil y aburrida, pero siempre he acabado riendo de mi propia puerilidad y lo he celebrado con mis amigos, que nunca me han fallado.

Este año ha sido diferente, estaba feliz y quería estar con todo el mundo, reunir a mi gente y pasar un buen rato arropada por los míos. Quería romper esa espiral de negatividad, además, este año iba a estar él y eso ya lo hacía todo especial.

Las cosas empezaron a torcerse desde el principio. Él tenía que viajar por trabajo, tenía que ir fuera de España y era posible que no hubiera podido regresar para mi cumpleaños, pero le dieron fecha de regreso justo dos días antes de mi cumple. Perfecto, pensé yo, hasta un viernes por la noche en el que me dijo, como aquél que no quiere la cosa, que se había ofrecido voluntario para quedarse hasta el 18.

Supongo que soy un poco sentimental y muy poco práctica, pero aquello me dolió. ¿Por qué decide obviar la fecha de mi cumpleaños con esa frialdad?, y es genial poder quedarse y hacer un buen trabajo, pero si ha decidido quedarse de motu propio, creo que lo lógico es tratar de que esa decisión afecte lo menos posible a las personas que se ven afectadas por ello, máxime cuando es mi cumpleaños, el primer cumpleaños que pasaríamos juntos.

Pero no, no solo no le ha importado lo mas mínimo dejarme sola este día si no que no me ha compensado en absoluto, no ha venido, los billetes son caros... bueno, en realidad no ha venido por que no considera que sea importante, pero lo es y nadie tiene por qué juzgar lo que debe o no ser importante para mi.

Pero es que tampoco me he encontrado un ramo de flores en mi casa el día de mi cumpleaños haciéndome llegar lo mucho que le gustaría que pasáramos juntos esta fecha, no, mas bien todo lo contrario, lo que he recibido como regalo de última hora ha sido un chaparrón por ser tan negativa, por amargarle el día, vamos, con mi tristeza...

Ha sido el peor cumpleaños de mi vida, sin lugar a dudas. Mi amiga N no podía venir por que ha sido madre hace seis meses y eso invalida totalmente la posibilidad de que el amargado de su marido se quede con el bebé y ella pueda salir un rato, pero yo no soy quien para juzgar lo que debe hacer una madre.

Ninguna de mis amigas de siempre ha estado a mi lado este año, todas tenían algo. Mi madre y mi hermana habían discutido y mi madre no fue capaz de hablar en toda la celebración familiar del evento cumpleañil. Eso ya me puso en contacto con lo mas profundo de mi tristeza. Luego empezó a cancelar todo el mundo, luego llegué a mi casa, estaba diluviando, me eché a llorar como hacía tiempo que no lo hacía y llamé a J, me echó en cara mi negatividad y me hizo saber que él prefiere dejar las cosas en stand by... ¡y qué hay de mi y de mis sentimientos!, así que me volvió a dar un arranque de lágrimas y tuve que colgar.

Hacía mucho tiempo que no me sentía tan turbada, tan triste, tan abandonada y tan sola.

Pero la noche aún podía empeorar. Salí de casa para encontrarme con un compañero de trabajo y bajar juntos hasta el lugar en el que se celebraría el peor cumpleaños de la historia. Llegamos al sitio, estaba diluviando y yo tenía los pies empapados. El sitio estaba cerrado. Obvio, cómo no, las cosas deben seguir una línea y a mi me había tocado la línea negra.

Fuimos a un local cercano a esperar a la gente, pero mi teléfono se estaba quedando sin batería yo no podía llamar, tampoco tenía muy claro quién iba a venir.

Aparecieron las venezolanas y apareció una vieja amiga del cole. Pues mi amiga del cole empezó a hablar, como es costumbre en ella, a la velocidad de la luz, a gritos y acaparando toda posible conversación. Las niñas estaban petrificadas.

Pero aún estaba por llegar lo peor, apareció el morreador nº2, hizo una entrada triunfal con un par de amigos, se apartó del grupo y empezó a gritar canciones para llamar mi atención alternando los berridos con miradas de soslayo. Me parece que los acabaron echando del local.

La gente de la facultad no solo no apareció si no que no dieron señales de vida.

Llegué a mi casa hecha una sopa, con unas copas de mas y queriendo eliminar ese día de calendario.

Y aquí estoy hoy, en la cama, escribiendo mis miserias y sintiéndome fuera del carril, he perdido el control de mi relación, esa que creí desde el primer día que era la primera y la única y que ahora pongo en duda. No se hacia donde voy, no se qué estoy haciendo. Se que mis miedos son mas terrores que sustos y que el pánico habla por mi en mi forma de sentir esta separación. Algo en mi quiere salir corriendo y apartarse, por que estoy muy bien en mi refugio donde solo estamos los gatos y yo y ellos siempre están ahí, nunca me fallan.

Quizás yo no valga para esto, no todo el mundo puede conducir aviones... y el amor es mucho mas complicado. Yo no quiero sufrir, no quiero sentirme ninguneada ni quiero que otra persona ponga las normas de mi vida y de mis emociones, no quiero que nadie me haga sentir que no merezco lo que yo creo que es justo para mi. Quiero estar sola.